Parque Juárez

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No abultar el acarreo el domingo 10 de abril

Por Mónica Camarena Crespo

Retomo las sabias palabras del ingeniero Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano, una de las mentes más coherentes de la izquierda en México “Creo que es inútil, que no hace falta, me parece que es muy importante y positivo que se haya incorporado los principios de la revocación de mandato en la Constitución, pero esto sería, desde mi punto de vista, aplicable para un siguiente periodo, para después del 24”.

La imposición de llevar a cabo una revocación de mandato que nadie exigió, responde a un capricho presidencial disfrazado de ejercicio democrático. Por ello, los resultados que empujan desde el poder a fuerza y con calzador, al obligar a todos sus empleados, allegados y seguidores a votar para que se quede el presidente, resulta el más inútil de los gastos, como lo fue la consulta para enjuiciar a ex presidentes.

Aún si salieran todos los mexicanos registrados en el padrón electoral a votar por el “No” el presidente no se iría, es más, él busca quedarse, perpetuarse y por ello, la votación del 10 de abril le dará señales de cómo operar la continuidad de su proyecto en el 2024.

El acarreo del próximo 10 de abril para llenar de votos a favor de que se quede el presidente lo realizará el partido Morena, es una operación y movilización de estado, con muchos millones en gasto que se van a la basura.

EL OBJETIVO

Él “Sí” lo dan por descontado, el escandaloso acarreo y el decomiso de credenciales de elector de la burocracia, lograran el primer objetivo. Sin embargo, lo que el presidente busca es la contundencia, es ahí donde los operadores (gobernadores y gabinete) se juegan todo para quedar bien con su jefe, quién así medirá los grupos rumbo al 2024.

Porque el verdadero objetivo sigue siendo evitar una consulta no participativa, impopular, con el desaire del pueblo.

Y es que, si aún y a pesar de la movilización y acarreo partidista, la operación descarada de estado, no se logran porcentajes del más del 50 por ciento de apoyo con un “Sí” entonces las alarmas se encienden el mismo 10 de abril con pronósticos que apuntan a una mayor radicalización del presidente, si es que hubiese un nivel más alto.

NO ACUDIR

Al no participar en un ejercicio “inútil” y muy “costoso” los mexicanos no seremos cómplices del capricho de quién utiliza al país para su ego personal y las ambiciones políticas con las que busca perpetuarse.

@monicamarena