Edmundo Jacobo Molina renunció como secretario ejecutivo del Instituto Nacional Electoral (INE), al considerar que no existen condiciones para continuar en el cargo.
«Esta renuncia es de carácter irrevocable. Con mi renuncia les digo a quienes me han respaldado que soy uno como ustedes, comprometido a defender la democracia», expresó.
El Secretario Ejecutivo del INE es la mano derecha de quien ocupa la Presidencia del organismo, por lo que Jacobo Molina prevé una situación ríspida e intransitable con quien asuma el cargo e unos días, ante las descalificaciones que ha recibido por parte del régimen gobernante.
«La notoriedad que sin buscarla he adquirido constituye un impedimento -desde mi punto de vista- para continuar desempeñando con discreción y eficacia las actividades propias del Secretariado Ejecutivo. Por eso, estoy convencido que conforme a la ética de la responsabilidad es el momento de retirarme», manifestó.
El funcionario electoral llegó al cargo en 2008 y, tras la reforma en la materia de 2014, se mantuvo otros seis años.
