SPI Veracruz
El escenario político este 2023 será de creciente radicalización del presidente López Obrador con el único objetivo de asegurar el triunfo de Morena en 2024, dio a conocer Integralia Consultores.
La organización dio a conocer su reporte Diez Riesgos Políticos para 2023, en el cual analizan los riegos que pueden afectar en el entorno de negocios y la gobernabilidad del país en 2023.
El informe precisó que la mayoría de los riesgos políticos que se vislumbran para este año están relacionados con la creciente radicalización el presidente López Obrador para garantizar la continuidad de su proyecto político.
Para ello, precisó el estudio, el oficialismo pondrá en marcha varias acciones, como debilitar a los contrapesos del Ejecutivo, a las autoridades electorales y a las oposiciones; exacerbar la polarización e intensificar las movilizaciones sociales con fines políticos-electorales.
Integralia Consultores afirmó que 2023 será un año de riesgo político alto e identificó diez. El primero de ellos, es que el oficialismo intensificará su embate en contra del INE, con el intento del Ejecutivo y Morena para sesgar el nombramiento de los cuatro nuevos consejos; problemas operativos y de gestión con la modificación estructural; y litigios por la implementación de la reforma electoral ante la Suprema Corte.
Otro riesgo será, ante la debilidad del Estado de Derecho, que los grupos criminales aprovecharán los procesos electorales para imponer o extender acuerdos con las nuevas gestiones a fin de operar con impunidad; habrá aumento de violencia política y electoral contra actores políticos y funcionarios públicos.
También habrá tensiones comerciales con Estados Unidos y Canadá por disputas en el marco del T-MEC, particularmente en la política energética, que de instalarse los paneles de controversia, México tendría altas probabilidades de perder, lo que pondría en riesgo la inversión privada.
De cara a las elecciones locales de Coahuila y Estado de México y el posible triunfo del partido Morena, aumentaría el riesgo de concentración de poder e ineficiencia gubernamental.
Se prevé que los militares incidan con mayor frecuencia en la toma de decisiones político-administrativas, debido a que el presidente López Obrador continuará promoviendo la militarización de tareas y responsabilidades civiles, que derivará en una creciente dependencia del gobierno hacia la Fuerzas Armadas.
En este quinto año, persistirá aumento de percepción y ocurrencia de corrupción y falta de sanciones penales, lo que propiciará mayor ocurrencia de prácticas ilícitas e ineficiencia gubernamental.
Se intensificarán los actos anticipados de precampaña de los aspirantes de Morena a la Presidencia de la República con autopromociones fuera del marco legal y celebración de eventos masivos. Esto generará incertidumbre jurídica por la falta de apego a las normas electorales; ineficacia gubernamental por la desatención de asuntos centrales de los gobiernos federal y locales y; divisiones internas en Morena.
Un escenario más, es que el Ejecutivo federal mantendrá los ataques contra el Poder Judicial de la Federación con el fin de asegurar que no se revoquen leyes, decretos y políticas de dudosa constitucionalidad, claves para el presidente, tales como la reforma electoral, la militarización, las políticas de “austeridad”, entre otros.
Integralia también puso en el escenario la recesión en Estado Unidos, que se reflejará en el sector exportador de México y en las remesas que recibe el país. Ante este panorama, el gobierno federal tendrá un margen bajo de maniobra para mitigar el impacto debido al poco espacio fiscal con el que cuenta.
Finalmente, las finanzas públicas se tornan más vulnerables debido a menores ingresos a los estimados, aumento de los costos de las obras de infraestructura insignia del presidente y la presión para concluirlas a tiempo. Además de la ampliación de programas sociales y la necesidad de otorgar apoyos a Pemex y CFE, con lo cual aumentarán los riesgos de deterioro económico.
