La criminalidad, los desastres, la minería, la tala ilegal y conflictos locales, dejan cientos de miles de desplazados en México, según observaciones preliminares de Cecilia Jimenez-Damary, relatora especial de la ONU que concluyó una visita de trabajo.
La experta en derechos humanos de las personas desplazadas internas llegó al país el 29 de agosto para visitar cuatro distritos mexicanos y entrevistarse con autoridades y activistas para conocer la situación de quienes se ven obligados a dejar sus lugares de origen.
Jimenez-Damary explicó que el gobierno federal no cuenta con una estadística, pero que “fuentes secundarias”, como organizaciones, académicos y autoridades locales, le entregaron estimaciones de que habría entre 350.000 y 400.000 desplazados internos en México, con 126 millones de habitantes.
“He observado que las causas del desplazamiento son diversas y multifactoriales. Entre ellas están distintos tipos de violencia, a menudo originada por el crimen organizado, a veces relacionadas con los proyectos de desarrollo, la minería y tala ilegal, o por los conflictos electorales, religiosos y agrarios“, dijo
Explicó que México no cuenta con un registro para medir la magnitud del problema, pero reconoció los esfuerzos del gobierno para elaborar una estadística y poner en marcha políticas públicas para atender y prevenir el desplazamiento.