Agencia Libertad
Mientras el sector automotriz nacional enfrenta un periodo de estancamiento luego de que la venta de autos nuevos se ha visto afectada por la falta de semiconductores, desconfianza y endeudamiento del consumidor, México superará la cifra de vehículos usados importados registrada en 2014 por el decreto presidencial y una severa corrupción en las aduanas del país, aseguró Guillermo Rosales Zarate, presidente ejecutivo de la Asociación Mexicana de distribuidores Automotores (AMDA).
Indicó que buscarán una reunión urgente con las autoridades, ante la inminente prolongación del decreto que en principio tenía como fecha límite el 20 de septiembre.
El sector, refirió, se encuentra en una franca incertidumbre por la entrada indiscriminada de los denominados autos “chocolate”, que ingresan al territorio mexicano a través del crimen organizado y que no son reportados de manera regular ni eficiente por parte de las autoridades. Se espera que este año entren 800 mil unidades.
“Una cifra que bien puede superar las 800 mil unidades, lo que nos estaría colocando en los niveles que se vivieron entre el 2006 y el 2012, con los resultados negativos para el mercado formal, tanto de vehículos usados, como de vehículos nuevos que ya conocemos. Hasta el momento no se ha dado a conocer por parte del gobierno federal de manera formal un cambio en la fecha límite para la regularización; el decreto en su modificación publicada en febrero, señala el 20 de septiembre como la fecha límite para la regularización”, subrayó.
Indicó que se ha incrementado el flujo de vehículos de contrabando en los últimos meses, por lo que una vez más llamó a la reflexión al gobierno de la República para poner fin a este programa de regularización y sobre todo, ordenar el cruce de vehículos en la frontera, que “sigue siendo un desorden” para beneplácito de los grupos organizados delincuenciales, que son quienes están teniendo mayor ventaja de esta situación.
Por otro lado, en conferencia de prensa, el líder de la AMDA, indicó que el estancamiento en el sector automotriz, aparte de los factores ya mencionados, tiene en contra el incremento de la tasa de referencia del Banco de México para controlar los niveles de inflación y que al mismo tiempo frena la compra de unidades.
“Nos encontramos en este momento en una fase de estancamiento, la cual, de acuerdo con nuestras consideraciones se prolongará lo que resta de este 2022 y en buena parte del 2023. La situación económica, la crisis derivada del Covid y que se ha traducido en disminuciones del poder adquisitivo de la población, en el incremento de las tasas y que tienen un impacto en la compra de vehículos”, dijo.
Aclaró que los precios de los autos aumentaron 8.67 por ciento en la primera quincena de julio, lo que representa una disminución muy ligera del 9.3 por ciento anualizado.
Detalló que, en el séptimo mes del 2022, se vendieron 83 mil 137 unidades, que a pesar de ser un dato positivo, las ventas anualizadas de agosto del 2021 a julio del 2022 se comercializaron un millón 13 mil 615 unidades, lo que significa una caída del 2.8 por ciento respecto del mismo periodo del 2020-2021.
Por su parte, Julio Galván, gerente de estudios económicos de la Industria Nacional de Autopartes (INA), indicó que en lo que va del año en todo el mundo, la falta de semiconductores ha frenado la fabricación de más de dos millones de autos, comparados con los más de nueve millones del 2021.
