Confirmando la estrategia de dilación para mantener en la “congeladora” la iniciativa para derogar el delito de ultrajes a la autoridad, el gobernador Cuitláhuac García Jiménez dijo que no hay plazos para que el Congreso local la discuta y se lanzó de nuevo contra las barras y asociaciones de abogados, a las que acusó –sin prueba alguna- de responder a la delincuencia organizada.
Según García, “nos quieren desarmar legalmente. Por eso yo dudo de algunos abogados que están pronunciándose y manifestándose contra el delito de ultrajes. Qué vamos a hacer si ellos se fueron contra los elementos de seguridad, cometieron el delito de ultrajes, vamos por ellos y hasta cabe la detención, por eso se diseñó la modificación».
“¿No creen que este tipo de grupos están interesados en pagar a ciertos abogados para decirles ‘vete a plaza Lerdo para que quiten el delito de ultrajes y que con eso salgan los delincuentes?”, especuló.
García Jiménez insistió en su perorata de que más de 40 jefes de plaza han sido detenidos gracias a ultrajes a la autoridad, por lo que “aprovecharían” la recomendación de la CNDH sobre derogar dicho delito, sin mencionar que esos delincuentes tendrían que haber sido imputados ya por ilícitos del orden federal para ser calificados como tales.
