Carta abierta de Mirtha Luz Pérez Robledo (madre de Nadia Vera) a las autoridades de la Ciudad de México
Comitán, Chiapas, a 18 de enero de 2021
A la CDH de la Fiscalía de la CDMX
A la Sría. de Cultura de la CDMX
“(…) Estado se llama al más frío de todos los monstruos fríos. Es frío incluso cuando miente; y ésta es la mentira que se desliza de su boca: “Yo el Estado, soy el pueblo” (…) pero el Estado miente en todas las lenguas del bien y del mal; y diga lo que diga, miente, y posea lo que posea lo ha robado. Falso es todo en él (…) hace señas a los predicadores de la muerte (…)” NIETZSCHE (Así hablaba Zaratustra).
Tras algunas reuniones de negociación y después de la negativa de algún modo soterrada, a nuestros requerimientos para el resarcimiento simbólico,(indemnización inmaterial o punto de reparación, como sea que se le quiera llamar, que al fin y al cabo es intangible y por lo tanto imposible), para las víctimas del Caso Narvarte (como ustedes suelen llamar a Alejandra, Yesenia, Mile, Nadia y Rubén), emanado de la recomendación núm. 4/2017 que emitió la CDH de la CDMX, envío esta carta para hacerles saber nuestro parecer.
Si hay algo que ofende y lastima en parecido grado a una familia agraviada por un criminal, es la ofensa que a la inteligencia de la misma familia haga una institución, que creada y así mantenida con los recursos de los ciudadanos para que su función sea en beneficio de los mismos, tuerza su misión y trate de evadirla con palabrería hueca, para tratar de imponer sus criterios creados para su propio beneficio y publicitación, sin tomar en cuenta lo que tiene significado para la familia agraviada, con el único propósito de evadir los recursos que podrían destinarse para actividades que sirvan para honrar la memoria de las víctimas .
Más valdría ser honestos, que eso se apreciaría más que decir no se puede por las razones que fuesen, así por órdenes de sus jefes más altos, así por carecer de recursos, así por no tener voluntad de hacer el trabajo, que presentar una propuesta que a ojos vistas puede apreciarse que es solo palabrería que pretende disfrazar la negativa y ocupar un proyecto institucional que no tiene significado para esta familia y nada tiene que ver con el proyecto propuesto por la misma y solo agrega ofensa a la inteligencia.
Por los motivos arriba expuestos, y dado que estas negociaciones no cambian de término y sólo nos hacen agregar quebranto a nuestro ánimo, haciendo perder el preciado tiempo a nuestros abogados que bastantes diligencias tienen que resolver en cuanto a que las investigaciones tampoco han hecho avance alguno; y pensando que tal vez es el objetivo real de ustedes, como es costumbre en acciones de gobierno, dar dilación para el desistimiento; y como dice Niesztche “no queremos que se convierta en nuestra fatalidad su venenosa injusticia”, he decidido retirarme y desistir del tipo de resarcimiento simbólico que ustedes proponen, que no así de la disculpa pública que sigue pendiente, y me desisto de esperar a que la sensibilidad llegue a su administración, porque está bien visto que no será así, como no fue en la administración anterior.
Aunado a lo anteriormente dicho, les hacemos saber que esta carta será una carta abierta para que se enteren los ciudadanos de la cuenta que dan sus instituciones cuando de cumplir su deber se trata.
Atentamente
Mirtha Luz Pérez Robledo
La mujer, la madre, la ciudadana.
(He dejado la fecha en que escribí la carta, para ver si había algún cambio, pero a esta fecha, 11 de abril de 2021, no hay noticia alguna)
C.c.p. Comisión de Derechos Humanos de la Ciudad de México.