Una mala conexión del drenaje pluvial y sanitario tiene al Lago de Las Ánimas sumido en una profunda contaminación que ha acabado con la flora y fauna que lo caracterizaban.
Un trabajo deficiente de la Comisión de Agua y Saneamiento de Xalapa (CMAS) el año pasado provocó que aguas negras invadieran su cauce.
El drenaje pluvial, destinado originalmente a canalizar el agua de la lluvia, arrastra residuos tóxicos, grasas y desechos de restaurantes, así como descargas de los sanitarios de las viviendas aledañas.
El resultado es que lo que fue un símbolo de la biodiversidad en la capital del estado es ahora un cuerpo de agua contaminado, que despide un olor fétido y gases tóxicos, en el que los patos, gansos y peces que lo habitaban, mueren irremediablemente.
Los vecinos de la zona señalan que efectivamente hay conexión de drenaje sanitario a pluvial que se conecta al Lago de Las Ánimas, ambos insuficientes.