Por Ruby Soriano
El año inició a todo vapor en el tema político-electoral donde la disputa por seis gubernaturas en el país, será crucial para el partido del Presidente AMLO (Morena) que pretende lograr victorias que le permitan consolidar la mayoría gobernante en México.
Asimismo, la alianza Va por México (PRI-PAN-PRD) enfrenta la prueba de fuego, para desafiar los aparatos de estado y mantener sus bastiones frente a la serie de embates internos que ya originaron la primera ruptura en Quintana Roo, donde el PRI irá solo.
Sin duda alguna, el reflector en estos procesos electorales los concentra Hidalgo, un antiquísimo y por tradición bastión priista donde todo apunta a que Julio Menchaca por Morena desafiará a su hoy ex partido el PRI, que en una maniobra del dirigente nacional Alejandro Moreno, negoció que la candidatura fuera siglada por el PAN aunque con un rostro muy priista como el de Carolina Viggiano, esposa de Rubén Moreira y operadora de Osorio Chong.
El próximo 5 de junio, Hidalgo, Durango, Tamaulipas, Oaxaca, Quintana Roo y Aguascalientes elegirán mandatarios estatales.
En Durango, Tamaulipas y Aguascalientes son cruciales las negociaciones que se están dando entre los integrantes de la Alianza va por México, para el cierre de filas en torno a sus candidatos.
Los gobernadores salientes también tienen sobre sus espaldas, el peso de lograr comicios sin conflictos o impugnaciones electorales aunque en algunos casos, como el de Oaxaca se habla de que Alejandro Murat entregará la plaza a Morena como una forma de congraciarse con el Presidente del país.
Las negociaciones detrás del telón pueden cambiar los escenarios de último momento, pues nada descarta esos pactos por debajo del agua y los acercamientos que se están buscando con Palacio Nacional a cambio de impunidad y del borrón de cuentas pendientes en los actuales mandatos.
Las elecciones de 2022 son la antesala de los grandes comicios del 2024. Por lo anterior todo escenario que está en construcción, será un reflejo del poder de operación de todos aquellos que van por mantener la plaza o bien entregarla a la oleada de mandatos morenistas.
Los gobernadores salientes tienen un permanente reflector sobre ellos, sobre todo cuando habrá quienes de último momento, le den un portazo a sus partidos de militancia, para facilitar el triunfo de Morena, en aras de blindaje e impunidad. Y sino, al tiempo.
@rubysoriano @alquimiapoder
