Por medida populista, Ahued deja sin recursos áreas productoras de agua en Xalapa

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SPI Veracruz

La suspensión del 2 por ciento sobre el recibo mensual del agua por parte del Ayuntamiento de Xalapa, agravará el abasto eficiente de agua en colonias marginadas y ensanchará la desigualdad especialmente de mujeres, alertó el Instituto de Recursos Mundiales México (WRI por su siglas en inglés).

El objetivo de dicha aportación voluntaria era lograr la conservación de 3 mil hectáreas en la subcuenca del Río Pixquiac, la restauración de 5 mil hectáreas en la cuenca del río Huitzilapan, institucionalizar un programa de cosecha de lluvia para los barrios que sufren de abasto irregular de agua potable y, el impulso al rescate de cuerpos de agua y ríos urbanos y la creación de jardines infiltrantes.

Si bien la organización destacó que Xalapa es punta de lanza en México en la implementación de Soluciones basadas en la Naturaleza para la resiliencia hídrica, con más de 15 años de trabajo, el anuncio del alcalde de Xalapa, Ricardo Ahued Bardauil de cancelar la aportación del 2 por ciento por cada usuario del agua y, quizás su cancelación definitiva, condenará a decenas de colonias a no tener acceso constante al servicio de agua potable, especialmente aquellas de mayor marginación.

La organización afirmó que entre las poblaciones más afectadas por la inequidad en la seguridad hídrica se encuentran las mujeres, dado el rol que frecuentemente se les impone para recolectar y administrar agua, además de realizar la mayor parte de las labores domésticas.

Por lo anterior, precisó que la suspensión en los avances para construir resiliencia hídrica en Xalapa tiene implicaciones importantes en materia de género y equidad social.

“Los efectos del cambio climático únicamente agravan las desigualdades existentes y los grupos con mayores condiciones de marginación son los primeros en ver afectaciones en su calidad de vida derivados de la falta de acciones locales de adaptación”, dice el documento de WRI.

El informe de WRI, destacó que fueron los patrones cada vez más irregulares y la degradación en las cuencas de abasto de agua a Xalapa, lo que originó que varias organizaciones locales y el Instituto de Investigaciones Sociales de la UNAM, echaran a andar en 2006 el Programa de Compensación por Servicios Especiales (Prosapix), para la subcuenca del Río Pixquiac

Para el 2007, el Ayuntamiento de Xalapa y su organismo operador (Cmas) y el gobierno estatal crearon el fideicomiso Comité de Cuenca del Río Pixquiac y, de los recursos obtenidos, se realizó el convenio de pago por servicios ambientales con la Comisión Nacional Forestal (Conafor), quien aportó fondos concurrentes a fin de conservar más de mil hectáreas de bosque de niebla o Mesófilo

No obstante, el mecanismo no solo encontró obstáculos para conseguir recursos para su operación, sino también a la creación de mecanismos de toma de decisiones colectivas y transparentes, sobre la asignación de estos mismos recursos, así como, obstáculo para la institucionalización de este tipo de programas en la ley local.

Otro intento fue en 2019, nuevamente Sendas A.C., Cemas y el Ayuntamiento de Xalapa crearon el Consejo de Servicios Ambientales y, para 2021, el órgano de gobierno de Cmas aprobó por unanimidad autorizar el cobro del 2 por ciento sobre el recibo mensual por los servicios de agua, drenaje y saneamiento como aportación voluntaria de las personas usuarias para el pago de servicios ambientales.

Los recursos obtenidos serían únicamente destinados a gestión integrada de los recursos hídricos en fuentes de abasto convencionales (agua superficial) y no convencionales (lluvia) y a acciones en cuerpos de agua y ríos urbanos Infraestructura verde y Soluciones Basadas en la Naturaleza.

El objetivo de dicha aportación voluntaria era lograr la conservación de 3 mil hectáreas en la subcuenca del Río Pixquiac, la restauración de 5 mil hectáreas en la cuenca del río Huitzilapan, institucionalizar un programa de cosecha de lluvia para los barrios que sufren de abasto irregular de agua potable y, el impulso al rescate de cuerpos de agua y ríos urbanos y la creación de jardines infiltrantes.

La recaudación inicial en su primer año fue de poco más de 5 millones de pesos.

Empero, dicha aportación se concibió como voluntaria bajo un esquema tipo “opt-out”, es decir, que de inicio los usuarios pagarían esta tarifa con la posibilidad de dejar de contribuir en cualquier momento, solicitándolo con un formato simple.

Según el informe anual 2021 de CMAS, el 36 por ciento de todos sus usuarios contribuyeron con el 2 por ciento adicional a su tarifa por consumo de agua potable.

Con esta recaudación, la CMAS pudo suscribir un nuevo convenio con la Conafor para el pago por servicios ambientales a través de Fondos Concurrentes en la Subcuenca del Río Pixquiac para el periodo 2021-2025.

Bajo este nuevo convenio, la CMAS aportó anualmente casi 1.3 millones de pesos (los cuales se cubrieron en su totalidad para 2021 con la aportación voluntaria), y la Conafor aportó otros 720 mil pesos.

Dicho convenio aseguraba la conservación de mil 474 hectáreas de bosques a través de la canalización de recursos a 377 beneficiarios, que son propietarios de terrenos forestales, ejidatarios y parceleros.

No obstante, si bien WRI México celebró que la aprobación de la aportación en 2021 fue el primer paso para institucionalizar el mecanismo financiero a fin de implementar acciones urgentes de adaptación al cambio climático.

Lamentó, por otro lado, que en 2022 el gobierno morenista de Xalapa (que encabeza Riacardo Ahued Bardahuil) anunciara la suspensión en el cobro de la aportación voluntaria, tras alegar la necesidad de una evaluación interna para decidir sobre su continuidad o cancelación definitiva, así como a las negociaciones para construir un instrumento financiero.

Es por ello que, WRI afirmó que la suspensión la tarifa voluntaria dejó a las ambiciones de resiliencia hídrica de Xalapa desprovistas de un ingreso específico para su implementación.