México, en riesgo de “colombianizar” su democracia por el crimen organizado y el financiamiento ilegal: Luis Carlos Ugalde

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Agencia Libertad

El ex presidente del extinto Instituto Federal Electoral (IFE), Luis Carlos Ugalde, señaló que los riesgos inminentes de la sobrevivencia de la democracia mexicana son la penetración del crimen organizado y el financiamiento ilegal de las campañas, que si no se atienden puede llevar a la “colombianización”.

“El primero de ellos es probablemente también el más peligroso: la intervención del crimen organizado en los procesos electorales. Es cierto que siempre ha estado presente, es cierto que participa y ha fondeado campañas, que ha sobornado candidatos ganadores, pero lo que hemos visto en los últimos años es que hay una presencia creciente en la movilización del voto, en la inhibición del voto de adversarios, e incluso en la intervención en casillas el día de la jornada electoral. Este tema nos puede llevar al riesgo de lo que se conoce como la colombianización de la democracia mexicana”, explicó, al inaugurar los Foros de Parlamento abierto que organiza la Alianza Va por México en la Cámara de Diputados.

Y este tema, añadió, si no se contiene corre el riesgo de avanzar muy rápidamente, “y observo que por temor, entendible, porque los candidatos no quieren denunciar, ni los partidos lo hacen, ha habido una falta de debate público sobre el tema. Y si no logramos resolver, contener, entender la gravedad que esto puede generar, en pocos años, en muy pocos años, el problema puede haberse salido de control”.

De hecho, añadió, en algunas regiones del país, la democracia mexicana se encuentra en un grave problema, a grado tal que los candidatos tienen que pedir permiso o su visto bueno a los criminales, o de plano renunciar porque así se los piden, “y ese tipo de participación del crimen organizado tiene que desincentivarse a través de mecanismos que dejen en claro que intervenir en una elección lejos de beneficiarles les va a perjudicar”.

El otro problema de la democracia mexicana, es el financiamiento ilegal de las campañas políticas: “el reducir el dinero de los partidos no es el tema, el asunto de fondo es cómo reducir estructuralmente los requerimientos financieros para hacer campañas políticas y ser competitivo”.

En este sentido, añade, el uso creciente de efectivo en la economía gubernamental es el instrumento fundamental para violar la Ley y para gastar de más, “es como el uso de armas en el crimen organizado: si no detienes el tráfico ilegal de armas, entonces no se va a poder combatir la fuerza de los criminales”.

Mientras los gobiernos utilicen efectivo para programas sociales o para el cobro de impuestos o pago de proyectos, será imposible frenar su intervención, y “debemos buscar la forma de eliminar el uso de efectivo”, consideró Ugalde Ramírez.

Finalmente, concluyó, el otro asunto que debe resolverse, para quitar la tentación a los gobiernos de intervenir en las campañas políticas, es “obligar a los gobiernos a que mejoren sus sistemas de contratación de obras públicas, y que todo sea a través de licitación y que se prohíba la asignación directa”.