De acuerdo con el protocolo de clases “Herramientas Didácticas para la Educación del Siglo XXI” que la Secretaría de Educación de Veracruz, a través del Consorcio Clavijero, está impartiendo ya en sus cursos de inducción para docentes de cara al siguiente ciclo escolar, los maestros que padezcan co-morbilidades regresarán a clases presenciales de manera “voluntaria” y firmando una carta responsiva para librar de responsabilidad al gobierno estatal por cualquier afectación a su salud a causa de la covid-19.
En uno de los materiales entregado a docentes que asisten a esos cursos –del que La Clave obtuvo una copia- se establece que “asistirán a los centros escolares el personal docente y administrativo o de apoyo de manera Voluntaria, si pertenecen al sector vulnerable porque padece: diabetes, obesidad, enfermedades del corazón, VIH o SIDA, cáncer, sistema inmunológico débil o tiene 60 años o más, podrá incorporarse siempre que firme una carta responsiva: puede solicitarla en la supervisión escolar” (sic).
En el protocolo que se le imparte al profesorado veracruzano se indica también que para el siguiente ciclo hay que seleccionar un esquema de clases, que puede ser presencial, virtual o híbrido; que existan en el centro escolar insumos como agua, termómetro, ventilación, espacio, mobiliario y “grupos burbuja”; así como cumplir con “las 3 V”: verde (del semáforo), vacunado y voluntario.
Incluso, se señala que lo de las 3 V “será determinada por el semáforo verde: durante cuatro semanas continuas el municipio al que pertenece el centro escolar deberá presentar esta condición”.
Apenas este martes, el gobernador Cuitláhuac García Jiménez adelantó que “vamos a arrancar (en agosto) con los que asistan y ya los padres serán responsables de la educación de sus hijos”. Y el fin de semana, desde Veracruz el presidente López Obrador advirtió que se regresará a las aulas a fines de agosto “llueve, truene o relampaguee”.
