En un acto que califica como violencia política de género, la candidata electa como regidora propietaria de Movimiento Ciudadano al Ayuntamiento de Xalapa, Hilda Elvira Aguilar, fue obligada a renunciar para colocar en su lugar a Consuelo Hernández, candidata suplente y esposa del excandidato de ese partido a la alcaldía, Román Moreno, vinculado políticamente al exalcalde y exdirigente «priista» Américo Zúñiga Martínez.
Hilda Aguilar fue presionada para dejar el cargo en un proceso opaco que responde a intereses de grupo y cuotas de poder y no a la legalidad y al respeto de los derechos políticos de las mujeres.
Este martes, Movimiento Ciudadano le entregó la constancia como regidora electa a Consuelo Hernández, quien fungía como suplente de Hilda Elvira Aguilar, junto con los demás ediles de ese partido.
La salida forzada de Aguilar constituye un caso claro de violencia política de género conocido como “juaniteo”, práctica que fue prohibida expresamente en la ley, pues se le arrebató un espacio ganado legítimamente en las urnas para favorecer a una figura vinculada a un hombre con poder político.
Ello constituye también un precedente grave de hostigamiento institucional contra una mujer a la que no se le permitió ni siquiera rendir protesta al cargo para el que fue elegida en las urnas, reproduciendo la exclusión de las mujeres en cargos de decisión y normalizando la idea de que sus posiciones pueden ser negociadas o sustituidas por conveniencia.
