La gobernadora de Veracruz, Rocío Nahle García, se pronunció sobre el violento motín ocurrido el pasado sábado en el Centro de Reinserción Social (Cereso) de Tuxpan, que dejó un saldo de ocho personas fallecidas y diez lesionadas.
En entrevista radiofónica, Nahle confirmó que el penal ya se encuentra bajo control y anunció la elaboración de un diagnóstico integral por parte de las autoridades estatales y federales.
La mandataria informó que la Fiscalía General del Estado (FGE) y la Fiscalía General de la República (FGR), en conjunto con la Secretaría de Seguridad Pública, la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), la Secretaría de Marina y la Guardia Nacional, están trabajando en un análisis profundo de los hechos. “Están preparando todo un diagnóstico global, hay carpetas (de investigación), y yo voy a esperar a que salga lo que arroje”, declaró.
Nahle rechazó cualquier vínculo entre su gobierno y grupos delictivos. “El gobierno no tiene pacto con nadie, con nadie más que con el pueblo. Lo demás, todo sale en su momento, y es lamentable”, expresó.
La gobernadora también destacó la labor del secretario de Seguridad Pública, Alfonso Reyes Garcés, a quien calificó como “serio, honesto y profesional”, y aseguró que su administración está comprometida con restablecer el orden y combatir la delincuencia organizada4.
Tras el motín, circularon videos en redes sociales donde internos denunciaron presuntos abusos, extorsiones y cobros ilegales por parte de integrantes del Grupo Sombra, una organización criminal con presencia en el norte de Veracruz. Aunque Nahle no comentó directamente sobre estos videos, insistió en que las investigaciones deben esclarecer los hechos.
La violencia en el norte del estado continúa. La Fiscalía confirmó el hallazgo de restos humanos cercenados en bolsas negras sobre la carretera Poza Rica–Cazones, en el municipio de Papantla, a una hora de Tuxpan. Se realizan pruebas periciales para determinar el número de víctimas y sus identidades.
