El dirigente nacional de Morena, Mario Delgado, fue abucheado durante la conmemoración de la victoria de este partido en la elección presidencial de 2018.
Los gritos en su contra comenzaron desde que se levantó para dar su discurso, de modo que la Jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum, conminó a los 20 invitados especiales en el pódium a levantarse de sus asientos para colocarse detrás de él en señal de apoyo.
Detrás de él todos aplaudieron, pero ni así cesaron los silbidos.
Delgado levantó la voz en un tono poco usual para intentar detener los gritos provenientes principalmente de la parte alta de las tribuna. «¡Fuera, fuera!» «¡Traidor, traidor!», le decían.
«Hoy vivimos una transformación de verdad. Tres años luchando contra la peste de la corrupción y la cultura individualista que querían imponernos como único camino. Llevamos tres años construyendo una patria más fraterna y solidaria.
El dirigente morenista manifestó que el 1 de agosto irán masivamente a la consulta para que haya juicio a ex presidentes.
En medio de la gritería, Delgado destacó que Morena pasará de gobernar 35 millones a 61 millones de personas y que cuando le preguntó a un «experto en béisbol» sobre la elecciones pasadas, éste le contestó que había sido un triunfo de «serie mundial».