En medio de numerosos hechos de violencia en todo el país, el presidente Andrés Manuel López Obrador se llevó de paseo por el Tren Maya a la presidenta electa, a los gobernadores en funciones y a los electos de Morena.
El trayecto fue de Cancún a Chichén Itzá y acompañaron a López Obrador la presidenta electa Claudia Sheinbaum, así como las y los gobernadores Quintana Roo, Yucatán, Baja California, Tamaulipas, Puebla, Oaxaca, Tlaxcala, Estado de México, Michoacán, Campeche, Baja California Sur, así como el mandatario en funciones de Veracruz, Cuitláhuac García, y la electa Rocío Nahle.
Los mandatarios y mandatarias –varios acompañados por sus cónyuges- lucían muy sonrientes en lo que la gobernadora de Campeche, Layda Sansores, destacó en X como “el último viaje de gobernadores con el hermano Andrés Manuel @lopezobrador_ y nuestra querida @Claudiashein. INOLVIDABLE!! (sic)”.
Mientras tanto, en Ojinaga, Chihuahua, este viernes fueron abandonados 11 cuerpos sin vida, con signos de tortura y mensajes alusivos a disputas entre el crimen organizado.
A su vez, en Chiapas, una niña de tres años murió calcinada después de que hombres armados secuestraron a su padre e incendiaran la vivienda en la que vivían en el municipio de Berriozábal, en la zona metropolitana de Tuxtla Gutiérrez.
En Sinaloa, donde hay una ola de violencia incontrolable desde el pasado 9 de septiembre, tan solo este viernes a las afueras de Culiacán fueron localizados los cuerpos baleados de cuatro hombres y una mujer. Mientras que el jueves cerró con seis homicidios, cinco de los cuales ocurrieron en la capital sinaloense y uno en Mazatlán.