No como el precandidato que llega a un municipio a prometer una carretera, sino como quien ya apoyó para construir esa carretera, volvió José Francisco Yunes Zorrilla a Coscomatepec, donde dijo a amigos y simpatizantes que “la gente ya está cansada de promesas y de falsos políticos. Por los políticos deben hablar los hechos, no las palabras”.
En reconocimiento a los logros alcanzados con la población de distintas comunidades de esta demarcación, el abanderado de la coalición Fuerza y Corazón por Veracruz a la gubernatura añadió que tampoco viene a prometer obras a cambio de votos, porque ya gestionó esas obras y ya están funcionando, como lo ha hecho en todos los municipios del estado, donde ha dejado huella de su gestión desde el Senado de la República.
El abanderado de los partidos Revolucionario Institucional (PRI), Acción Nacional (PAN) y De la Revolución Democrática (PRD) explicó que, sin embargo, se puede hacer mucho más desde el Gobierno del Estado, donde se toman las decisiones y se administran los recursos de la gente para convertirlos en obras que beneficien a todas y todos.
Se refirió a las posibilidades de producción, crecimiento y desarrollo que daban los buenos gobiernos antes de 2018. Entonces “llegaron 50 millones de pesos que se convirtieron en aulas, carreteras, apoyos, electrificación… Hoy no ha llegado un solo peso del gobierno federal y estatal, porque para el gobierno de Morena no importan los pobladores de Coscomatepec y sus comunidades, ni lo que sufren sus mujeres y ha dejado de lado a los jóvenes, campesinos, productores y comerciantes”.
Pepe Yunes señaló que, por esta indolencia del gobierno, cada semana llegan camiones que se llevan a los habitantes que tienen que irse a trabajar a otro estado, municipio o país, lejos de sus familias, porque en su tierra, aun con tanta riqueza y talento, no tienen oportunidades.
Llamó a hombres y mujeres a sumarse a este nuevo proyecto “para cambiar Veracruz de verdad, para hacer del gobierno un aliado permanente de la gente que más necesita, para dejar los discursos huecos en la basura y que el gobierno se vea en los hechos” en la vida cotidiana y en una mejor vida.
Para el precandidato, es vital la participación de todas y todos en los asuntos que son urgentes como el trabajo, la economía familiar, alimentación, seguridad, educación, salud, mejores carreteras y calles. “Por eso quiero ser candidato. No nos quedemos cruzados de brazos y arrinconados. ¡Cuento con ustedes! Como ustedes han contado conmigo”.