Para exhibirlo como un dirigente ausente e inútil, militantes morenistas colocaron lonas, carteles y hasta un muñeco con la imagen de Esteban Ramírez Zepeta por diferentes puntos de la capital de Veracruz.
Algunas de las lonas eran una parodia de una ficha de “Alerta Amber” con la que la Comisión Estatal de Búsqueda de Veracruz reporta a las personas con denuncia de desaparición.
Las mantas llevaban la palabra “Desaparecido” y la frase “se agradecerá a la persona que de información sobre su paradero”, que de acuerdo con los morenistas, es una forma de llamar la atención sobre la ausencia de Ramírez Zepeta entre las bases de su partido en el estado.
Incluso, un muñeco con una imagen de su rostro y la frase “Esteban Ramírez Zempeda” fue colocado frente a palacio de gobierno.
Molesto por la burla a quien fuera su secretario particular y cercano amigo de juventud, el gobernador Cuitláhuac García lo defendió.
“Ya la gente por fortuna, lo puedo decir por Veracruz, pero creo que del país, hablemos de la gente que tiene participación política, ya tiene una concepción muy clara, un despertar de la conciencia que no se va con cualquier información, que no van a poder engañarla con ese tipo de cosas, ni aunque tapicen el cielo” (sic).