Remembranzas

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La anhelada alfabetización

 

Por Leticia Perlasca Núñez

 

Cada 8 de septiembre se celebra el Día Internacional de la Alfabetización. La Conferencia General de la UNESCO (Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura) durante su 14ª sesión celebrada el 26 de octubre de 1966, declaró este día, con el fin de recordar a la comunidad internacional la importancia de la alfabetización de las personas, las comunidades y las sociedades, así como de la necesidad de intensificar los esfuerzos para lograrlo.

En México se cuenta con el Instituto Nacional para la Educación de los Adultos (INEA), el cual trabaja para alcanzar la “alfabetización plena” de acuerdo con los estándares internacionales establecidos por la UNESCO. Así, para impulsar la alfabetización de las personas que en México aún no saben leer ni escribir se cuenta con el Modelo Educación para la Vida y el Trabajo (MEVyT).

Sin embargo, aún falta mucho por hacer; algunos de los principales problemas de acuerdo a especialistas son: El acceso limitado a libros en las escuelas y en los hogares de los estudiantes; Inestabilidad y falta de  participación de la familia del estudiante en su proceso de aprendizaje; Falta de acceso a programas de alfabetización temprana de alta calidad y escasez de diversidad cultural en los distintos recursos de lectura, entre otros.

De acuerdo a la UNESCO, actualmente existen 750 millones de adultos que carecen, incluso, de las aptitudes más básicas de lectura, escritura y aritmética. Además, 264 millones de niños y jóvenes no reciben educación escolar y, un gran porcentaje de la población adulta y joven de todo el mundo ―hasta de los países desarrollados― no cuenta con las competencias digitales básicas indispensables para funcionar plenamente en las sociedades y los trabajos de hoy en día.

El reto inmediato es identificar y diseñar el tipo de educación que vamos a necesitar en el futuro. Definir qué es lo que queremos que aprendan las nuevas generaciones, más allá del riesgo latente -como sucede- en México, donde se busca politizar la educación.

 

@PerlascaLety

FB Leticia Perlasca