No basta con la euforia
Por Javier Solórzano Zinser
Una cosa es la euforia con que la oposición se ve y otra muy distinta es la que provoca. Algo de esto pasó ayer con motivo de la creación de Unid@s, proyecto de seis organizaciones de la sociedad civil al que pretenden sumar al PAN, PRD y parte del PRI.
La propuesta es organizar un nuevo frente opositor que permita sumar a todas las fuerzas sociales y políticas posibles de cara a la nueva obsesión en que se han convertido las elecciones del 2024.
El Presidente no dejó pasar el acto al que no tomó con seriedad y más bien se dedicó a ironizar tratando de poner en evidencia una vez más a la oposición, habrá que reconocer que en algunos casos con cierta razón.
El Presidente construye cotidianamente un discurso que le permite tener un halo que le da capacidad de maniobra para moverse casi como quiere, a pesar de en más de alguna ocasión cae en contradicciones que han provocado cuestionamientos fundamentados.
Si López Obrador no tiene respuesta a lo que le plantean o le critican, se la busca. Al paso del tiempo bajo las mañaneras tiene el control del discurso y la agenda.
La oposición no puede desarrollar una estrategia sólo con voluntarismo y buenas intenciones. Sus proyectos han venido permeando poco o nada en el grueso de la sociedad. Es precisamente en este sector en donde el Presidente tiene el control, que a estas alturas se ve muy difícil de poder compartir.
La oposición parece tener un proyecto fundamentalmente en contra de López Obrador, éste es su punto de partida. Mientras el Presidente siga con altos niveles de popularidad y siga teniendo entre sus millones de seguidores actitudes de incuestionable militancia y de admiración las cosas van a seguir por el rumbo en que andamos.
La estrategia presidencial ha sido efectiva. Responde al aquí y ahora y por lo mismo para sus furibundos seguidores no hay manera de ver más allá que el presente. No se puede ver el futuro porque a mucha gente se le está resolviendo su presente, que en el fondo es también una forma del gobierno de invertir electoralmente en el futuro. En algunos casos se resuelve el presente como nunca antes había pasado.
Es lógico que la oposición quiera unirse en un frente amplio ante la evidente fuerza del gobierno, no hay manera de que se tenga otra estrategia.
Pero también es importante considerar que bajo las actuales condiciones en que se encuentra la diluida oposición, se le suma la confusión, la fuerza del Presidente, los problemas en las votaciones en el Congreso y la presencia de organizaciones de la sociedad civil que en algunos casos parecen ser extensiones de algunos partidos; ante esto el futuro para la oposición se vuelve inevitablemente incierto.
No es casual que el Presidente ironice y hasta se ría. No es un problema de quién tiene la razón lo que importa, cómo se dice en Alicia en el País de las Maravillas, es quién tiene el poder, porque además de tenerlo lo ejerce a plenitud.
Como decíamos ayer, no tiene sentido estar esperando el error o el escándalo que cuestione al Presidente. Ya se ha visto que las circunstancias bajo las cuales estamos pasan por serios asuntos que sin duda son de primera importancia y que en muchos casos dejen en evidencia las contradicciones y problemas del Presidente, al final el discurso se vuelve precisamente en el ejercicio del poder.
El debate sobre la reforma electoral puede definir parte del futuro de la alianza opositora en su conjunto. A pesar de la división que hay entre la oposición, ponerse de acuerdo en un tema de tanta relevancia puede atemperar los ánimos.
Sin embargo, la verdadera tarea está en construir proyectos, porque sin ellos, por más que les dé por la algarabía y la euforia, no les va a alcanzar.
RESQUICIOS
Entre los archivos hackeados a la Sedena se dio a conocer que la Defensa Nacional reveló que hay un alto riesgo de colapso en el tramo 5 del Tren Maya, lo cual coincide con el análisis de a quienes han llamado seudoambientalistas.