Por Víctor Roccas
El día de hoy el nuevo secretario de Gobernación, Adán Augusto López Hernández, quien tomó tutoría de las mañaneras, explicó de manera solemne que “la raíz de todos los males es el amor al dinero”.
Lamentablemente el Sr. Adán se quedó muy cortó con su apreciación filosófica pues la realidad es que el amor al dinero se traduce en solo avaricia y que el susodicho origen de todos los males es más complicado que tan solo la simple codicia.
Apegándonos a la historia humana encontramos más que fundamentado el origen esencial de las debacles sociales en el ejercicio autoritario y totalitario de sus gobiernos, remontándonos por ejemplo al Imperio Romano encontramos que la raíz de su decadencia estaba en el ansia de poder a través de herramientas como la milicia, la familia, la herencia, traición, la mentira, el asesinato, el chantaje, la violencia, la lisonja, el servilismo, el secretismo, la envidia, la consanguinidad, el nepotismo, el favoritismo, pan y circo, la religión, etc.
Lo mismo sucede con otros ejemplos históricos como el Imperio Egipcio, el Imperio Chino, el Imperio Japonés, y otros en donde el dinero era solo un factor de la fórmula anhelada para retener el poder incluso mediante la imposición de dinastías como los Borgia o los Medici.
De facto existen bastantes ejemplos en la época de las monarquías europeas donde era frecuente encontrar fortunas mayores en manos de nobles que la misma riqueza del Rey, sin embargo quien ostentaba todo el poder era el Monarca.
Si buscamos incluso en la mitología nos encontramos con la leyenda de la Caja de Pandora que nos refiere una caja abierta sin permiso por la misma Pandora, regalo de Zeus a Epimeteo, que contenía todos los males como enfermedades, ambición, sufrimiento, guerras, hambre, envidia, ira, etc, destacando que dentro también se hallaba la esperanza…
En el caso de este gobierno y de muchos otros en el pasado, sin duda el origen de todos los males que han aquejado al pobre pueblo pendejo es, sin dudarlo, el anhelo por mantener el poder en manos de los mismos gobernantes y la esperanza, esa esperanza que como parte de todos los males contenidos en la caja abierta por Pandora, aún obnubila a millones de individuos para seguir votando a puro hijo de la chingada, parte indivisible de cada gobierno, en cada elección.
El mismo Sr. Adán Augusto López H. es ejemplo de que el dinero no es el peor de los males, sino el acopio de poder patrocinado por un grupo, en este caso el grupo Tabasco, que sin ser ninguno de sus miembros multimillonarios Forbes han logrado posicionarse en el poder de manera inequívoca a base de medrar en los drenajes de la partidocracia.
El Sr. Adán incurre en obvia omisión al no recordarnos sus nexos familiares con el PRI, el PRD y la partidocracia como:
-Humberto Mayans Canabal (Senador, Diputado, Secretario de Gobierno de Tabasco, por el PRI, y hoy flamante miembro del Consejo de Administración de Petróleos Mexicanos) y quien está casado con la hermana de Adán Augusto, Silvia.
-Silvia Aurora López Hernández (Controvertida Directora de Finanzas del Congreso del Estado de Tabasco).
-Humberto Mayans Hermida (Administrador Central de la Coordinación Estratégica de Auditoría de Comercio Exterior SAT, hijo de Humberto Mayans Canabal).
-Fernando Mayans Canabal (Senador, Diputado por el PT, MC y PRD, hoy Director General del Instituto de Seguridad Social del estado de Tabasco).
– Rosalinda López Hernández (Senadora, Diputada, primera dama, esposa del Gobernador de Chiapas Rutilo Escandón Cadenas y administradora General de Auditoría Fiscal Federal del SAT, por supuesto hermana de Adán).
Y sin mencionar a otros muchos nuevos miembros del Grupo Tabasco ni entrar en más detalles sobre la obvia concupiscencia por el poder de la “famiglia” Mayans-López, todos ellos han recorrido bastante trecho en la grilla mexicana y es hoy cuando han arribado al poder absoluto de la presidencia gracias al “mesianazgo”, perdón, mecenazgo tabasqueño.
Solo queda entendido que el amor al dinero no es el origen de todo mal como la hoy poderosísima familia de Adán Augusto lo ha confirmado ni tampoco como desde el púlpito de cada mañana se cacarea bajo la justificación de una austeridad que no existe más que obligada para 100 millones de habitantes que viven bajo condiciones de vulnerabilidad en este país ya no bananero sino cocotero.
Así pues no nos hagamos pendejos, en la fuente de todos los males existe la ambición, sí, pero la ambición de poder establecida bajo la ignorancia, la esperanza, la fe, la inconsciencia, la mentira, la corrupción, la impunidad, la injusticia y en el caso de la 4T bajo resguardo una vez más de un grupo de ojetes que forman la corte del monarca en turno.