Con más pena que gloria, deja Mercedes Santoyo la Contraloría del Estado; cerró los ojos ante acarreo obligado de burócratas a actos políticos de Morena y acoso en gobierno de Cuitláhuac

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Mercedes Santoyo Domínguez presentó su renuncia como contralora general del estado “por asuntos estrictamente personales”, anunció en sus redes el gobernador de Veracruz Cuitláhuac García Jiménez.

El mandatario publicó la tarde de este lunes que “he aceptado la renuncia de nuestra amiga y gran compañera, Mercedes Santoyo Domínguez, quien por asuntos estrictamente personales ha decidido separarse del cargo de contralora general del estado”.

Asimismo, dio a conocer el nombramiento de Miguel Ángel Olivares Martínez como el nuevo titular de la dependencia, “con el compromiso de seguir el gran trabajo realizado por su antecesora”. Ocupaba el cargo de director general de Responsabilidades Administrativas de la misma Contraloría.

Durante su gestión, la también administradora en procesado de alimentos fue omisa para castigar un gran número de irregularidades y abusos al interior de la administración de Cuitláhuac García, como que los empleados estatales sean obligados a asistir actos partidistas de Morena, a repartir propaganda de ese partido y sus candidatos los fines de semana, así como el uso de los cargos públicos para la promoción política personal de funcionarios como los ex secretarios Eric Cisneros Burgos, Dorheny García Cayetano o Zenyazen García Escobar.

Como titular de la Contraloría, Mercedes Santoyo tampoco encontró irregularidad alguna en las concentraciones multitudinarias organizadas por la organización pro-morenista Unidos Todos, que encabeza el subsecretario de Finanzas Eleazar Guerrero, mismas que se llenan con burócratas y beneficiarios de programas sociales.

Solo será recordada por haber llamado “feminazis” a las mujeres durante una comparecencia ante diputados locales y por haber cerrado los ojos ante las múltiples denuncias por acoso en la administración de Cuitláhuac García.