No es lo mismo Dos Bocas, que varias bocas…
Por Mónica Camarena Crespo
Previo a su arranque de campaña el 31 de marzo de 2024, la entonces candidata de Morena y aliados a la gubernatura, Rocío Nahle García, vivió un muy mal momento en conocida cafetería de la zona conurbada Veracruz-Boca del Río.
Esa mañana, acompañada de otros candidatos de su misma coalición, escuchó a varios comensales que a gritos decían: “¡fuera!” y “¡que se vaya!”.
El rechazo ciudadano de una zona importante políticamente se viralizó muy rápido a través de redes sociales. Ni sus acompañantes, ni su equipo de seguridad pudieron hacer nada y, aunque adjudicaron “guerra sucia”, lo cierto es que la reacción fue espontánea.
Ante la actitud de los parroquianos veracruzanos, Rocío Nahle solo atinó a saludar a los integrantes de su equipo de campaña, así como a algunos simpatizantes, para después abandonar el lugar. Su cara lo decía todo.
Rocío Nahle de acuerdo a los órganos electorales, ganó la elección a la gubernatura de Veracruz, con todo y un buen expediente de impugnaciones y denuncias que literalmente se ignoraron.
UN AÑO Y MEDIO DESPUÉS
Esta vez sin fotografías ni videos, nos comentan comensales de conocida cafetería en la zona conurbada Veracruz-Boca del Río que la ahora gobernadora llegó a inicio de esta semana a reunirse con un grupo de personas y que presuntamente habría recibido algunas muestras de rechazo.
Nadie sabía de la visita de la gobernadora, que, por cierto, acababa de encabezar un acto multitudinario en la Plaza Lerdo en Xalapa con miles de “espontáneos” para celebrar el primer año de su gobierno.
Nuevamente en una parroquia, a inicios de esta semana, la gobernadora tuvo que soportar los gritos de pocos comensales que le dijeron: “¡Fuera, fuera!”.
Rocío Nahle tiene una presencia importante en el sur del estado, principalmente en Coatzacoalcos, en donde se radicó por varios años. Ella decidió ser veracruzana por adopción y eso a nadie se le debe cuestionar.
Son más de uno los gobernadores que no nacieron en Veracruz; sin embargo, a la exsecretaria de Energía le está costando trabajo enfrentar a los puros y verdaderos. Ni hablar, habrá que trabajar en ello.
Ágora
No hay que pedir la renuncia de ningún funcionario del gabinete de Nahle pues nadie se irá. Como en todo gobierno, después se arrepentirá de no haberlos despedido a todos.
X: @monicamarena
