MÉXICO INCONSTITUCIONAL
Por Mónica Camarena Crespo
La mayoría de Morena y rémoras en el Senado no tuvieron problema alguno para aprobar la supremacía constitucional, iniciativa que plantea que la Suprema Corte no pueda interferir o ‘echar abajo’ la reforma judicial, entre otras barbaridades que pisotean el Estado de Derecho.
La iniciativa morenista de reforma constitucional “aún con ajustes” modifica dos artículos 105 y 107, en materia de improcedencia de juicios de amparo, acciones de inconstitucionalidad o controversias constitucionales contra reformas constitucionales, es decir, México en el “desamparo”.
En los debates por la iniciativa, la discusión se centró en un tema muy importante, la retroactividad de los nuevos ordenamientos, lo que implica que todos los recursos presentados contra la reforma judicial queden sobreseídos, lo que era uno de los principales objetivos del que se fue a su rancho de Chiapas “La Chingada”.
Las alarmas se encendieron hace mucho, pero la preocupación fundada es que el Congreso tenga el control total sobre las reformas, sin la posibilidad de revisión judicial, es decir, de uno de los tres poderes que hasta hace poco tenía México.
La supremacía constitucional no es otra cosa, que concentrar el poder en el Ejecutivo, el legislativo ya está controlado por el partido en el poder y el Judicial a punto de desaparecer.
En síntesis, Morena toma el control de los tres poderes de la nación: el Ejecutivo, Legislativo y vía elecciones, el Judicial.
Los cambios constitucionales, van más allá de un acto de modernización legislativa. Es una operación para instituir un estado autoritario, donde únicamente la postura del partido gobernante es la que impere.
Pero la historia, sin duda, pondrá a varios en el banquillo de los acusados, pero por lo pronto, México acaba de ingresar a una dictadura de facto.
Ágora
Será el sereno, pero con todo y súper policía en la Secretaría de Seguridad de Claudia Sheinbaum, el país arde en violencia e inseguridad.
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