Vengar a Nahle
Por Mónica Camarena Crespo
El destape del enriquecimiento cada vez más explicable y exhibición de múltiples propiedades de Rocío Nahle y su familia, se lo adjudican en autoría intelectual a los Yunes de Boca del Río.
El escándalo Nahle es irreversible y el golpe electoral estuvo bien asestado, con información real. Ahora no buscan quién se las hizo sino quién se las pague y al parecer, la venganza se dirige al ex gobernador Miguel Ángel Yunes Linares, hijos y otros militantes del PAN, todos contendientes a diversos cargos en el actual proceso electoral.
Y es que ninguna “estrategia de cuarta” le ha funcionado a Cuitláhuac y su pandilla, en el desesperado intento de revertir el escándalo Nahle.
La etiqueta de corrupción que porta la candidata de Morena al gobierno de Veracruz no la han podido mover ni un milímetro y los números en las encuestas, bajan y bajan.
El plan ahora es V, de venganza y ya está en marcha, como lo han venido advirtiendo desde el domingo pasado los Yunes de Boca del Río, que dicho sea de paso son candidatos al Senado.
Presuntamente desde Palacio Nacional le ordenaron al poco aplicado Cuitláhuac García, el que cobra todavía como gobernador, ejecutar órdenes de aprehensión y revivir el presunto fraude en la adquisición y operación de cámaras de videovigilancia cuando fue gobernador Yunes Linares.
Con la mala fama del gobierno de Cuitláhuac García, uno de los más represores que se recuerden, no se duda que estén mal armando de nuevo el expediente en contra del ex gobernador, que ya advirtió que no se va a quedar cruzado de brazos.
Ejecutar órdenes de aprehensión en contra de candidatos siempre ha sido la mejor fórmula para victimizar a políticos y crear mártires electorales.
Para la alianza opositora puede ser una buena noticia la persecución en contra de los Yunes y sus cercanos, nada mejor que una venganza política desesperada, que confirme que el partido en el poder le tiene pánico al resultado en las urnas el próximo 2 de junio.
Ágora
El libro Los Puntos Sobre las Íes de la ahora perseguida por López Obrador, María Amparo Casar es muy puntual en varios temas, por ejemplo, el que se refiere a la falta de cumplimiento de cuatro promesas que hizo AMLO: “un crecimiento económico de 6%, la disminución sensible de la pobreza, el combate a la corrupción y la seguridad para todos los mexicanos.
Ninguna se ha cumplido. Al quinto año de gobierno el producto interno bruto (PIB) creció 0.6% respecto al 2018. Sin embargo, como la población creció 0.9%, el PIB per cápita hoy es 0.3% menor que el que se registraba al inicio del sexenio. Los homicidios superaron al cierre de 2023 la cifra de 173 000. Más que los 122 000 del sexenio de Enrique Peña Nieto o los 96 000 del de Felipe Calderón. La más alta desde que se mide este indicador. La corrupción no ha cedido un ápice”. Ahora se entiende todo.
Ágora II
Fidel Ordoñez Solana, descansa en paz solidario amigo, se te va a extrañar.
X: monicamarena
