Myriam Lagunes Marín, integrante del Sistema Estatal para Prevenir, Atender, Sancionar y Erradicar la Violencia contra las Mujeres, sostuvo que durante los últimos cinco años el Instituto Veracruzano de las Mujeres se ha mantenido acéfalo y los consejos Social y Consultivo desintegrados.
Esto ha repercutido en que Veracruz mantiene dos alertas de violencia de género contra las mujeres y una más en proceso por desaparición de mujeres adolescentes y niñas.
Aún con este panorama tan desalentador, sentenció, un grupo de mujeres, “liderado por quien se nombra como presidenta del Consejo Consultivo (desintegrado e inoperante) salió en defensa de su candidata, sin importar todas las demás mujeres a las que la actual administración les ha dado la espalda. Queremos respuestas reales de las instituciones, basta de simulación”.
No a la manipulación de la violencia política contra las mujeres en razón de género
Las dirigentes estatales de Mujeres del PAN, Montserrat Ortega, del PRI Yolanda Lagunes, y del PRD Alejandra Riaño, se pronunciaron en contra de la manipulación de la violencia política de género.
“Las mujeres veracruzanas, la oposición política manifiesta en el Frente Amplio Opositor, Fuerza y Corazón por México, Fuerza y Corazón por Veracruz, tenemos muy claro lo que es la Violencia Política en contra de las mujeres en razón de Género que hoy busca enmascararse con arengas y llamados proselitistas de la candidata de Morena, Rocío Nahle, para victimizarse.
“Veracruz ha sufrido en carne viva el sacrificio de nuestras mujeres ante la escalada feminicida. Somos el tercer lugar nacional, hemos llorado por la desaparición o muerte de nuestras madres, hijas, hermanas; por nuestras vecinas, compañeras de trabajo y nuestras jóvenes que nunca más regresaron a sus hogares, como para hoy permitir que se desvirtúe con manejos electorales y marchas obligadas”, acusaron.
“Las mujeres veracruzanas, sus organizaciones civiles, los colectivos que históricamente abanderan esas causas por violencia en todas sus modalidades, por desapariciones forzadas, crímenes de odio de cara a la indolencia gubernamental, no podemos permitir que esta aspirante de origen zacatecano use esa bandera teñida en sangre como estandarte de justificación cuando su pasado ominoso la señala no por creerse víctima de violencia política contra las mujeres en razón de género, sino por su pasado de corrupción y fortuna inexplicable por esa ostentación de lujos que ofende a la sociedad veracruzana.
“Vaya nuestro más enérgico repudio a esta aspirante a gobernar Veracruz en donde el 52 por ciento somos mujeres y veracruzanas de verdad”, enfatizaron.