Falta mucho tiempo, pero…
Por Javier Solórzano Zinser
Son muchos los factores que intervienen para que Claudia esté en los niveles de popularidad en los que está. Está expuesta todos los días y la maquinaria de Morena y el Gobierno está echada a andar no solamente en lo que corresponde al apoyo que le ofrecen sino, sobre todo, señalando cualquier cosa adversa que tenga que ver con Xóchitl por menor que sea.
No van a dejar de buscarle, porque la encuentran como un adversario de riesgo. No solamente se debe a que está en la competencia, sino que su perfil tiene muchos elementos de lo que presume la 4T.
Los señalamientos más lamentables que han lanzado contra Xóchitl tienen que ver con su origen. Pareciera que ahora tenemos personajes, ideólogos o algo parecido de la 4T, que determinan con tintes racistas quien tiene derecho a decidir quién es de origen indígena y quién no.
El plagio del trabajo que presentó la hidalguense para recibirse en la UNAM, no pasemos por alto que junto con dicho documento también se consideró otorgarle el título por la experiencia laboral, le va quitando tiempo y espacio en su quehacer político cotidiano. Sin duda fue un craso error que está pagando, lo que sucede es que en este caso se concentran todas las baterías en contra de ella, lo que ha llevado a que les sirva para limpiarle la cara a personajes señalados por lo mismo, quienes, por cierto, se han defendido legalmente para impedirle a la UNAM dar a conocer el dictamen de la Comisión de Ética sobre su caso.
La campaña del Presidente en su contra no pasó de largo y tuvo secuelas. Fue un punto de partida con tintes ominosos, porque además utilizó información del Gobierno sin importar la ética y las reglas de convivencia política.
López Obrador logró concentrar la atención en lo que quería y le dejó a Claudia libre el terreno en medio de impugnaciones respecto a la forma en que ganó las encuestas de Morena, a pesar de que no había duda sobre su victoria. Lo que se puso en la mesa, y sigue estándolo, fue la forma en que se obtuvo el triunfo.
El impugnador está cada vez más aislado y pareciera que a estas alturas poco importa si tiene razón o no respecto a sus señalamientos sobre la victoria de la exjefa de Gobierno.
Xóchitl ya está en los terrenos de que todo es contracorriente. Mientras Claudia anda haciendo campaña por todo el país con el aparato de gobierno a la mano, la senadora está buscando salir de los muchos líos en que la meten y se mete lo que la coloca en el extremo sin poder armar su equipo.
Desde hace dos semanas se viene hablando que va a tener un grupo de voceros, pero el tema simple y sencillamente no se ha consolidado.
Xóchitl tiene que dar la cara para todo y por más que los partidos del Frente argumenten que no quieren aparecer de manera regular para que se logre perfilar una candidatura ciudadana, es evidente que en muchas cosas va absolutamente sola.
Las encuestas de estos días lo único que hacen son reflejar la distancia que hoy más-menos tiene Claudia sobre Xóchitl. A la candidata del Presidente le han ido creando un halo ganador que busca crear condiciones en el imaginario colectivo de que es ganadora desde ahora.
Sheinbaum como extensión política de López Obrador ya va diseñando su programa de gobierno en donde para algunos es lo que seguramente viene, porque de manera soberbia andan viendo las elecciones como un trámite.
Claudia se ve cada vez más asentada y dueña de su entorno, mientras Xóchitl se ve apurada tratando de resolver la infinidad de líos. Si la hidalguense no da un golpe en la mesa y aparece a nivel nacional con fuerza y como alternativa, lo que estamos viendo hoy en las encuestas terminará consolidándose en el 2024.
RESQUICIOS.
Se acabaron los tiempos de las sedes de los mundiales de futbol en un solo país. La FIFA impone tantas exigencias que por más popular que es el futbol más vale por los costos compartir sedes. A eso se suma que pueden participar 48 selecciones; el futbol da para el negocio y para el jolgorio.