Aun cuando este sábado se comenzará oficialmente operaciones, la refinería Olmeca-Dos Bocas, una de las obras insignia del sexenio obradorista, no producirá aún ni una gota de gasolina.
A pesar de las promesas de que la nueva refinería produciría sus primeros barriles de gasolina a partir del mes de julio de este año, el complejo no producirá combustible todavía, ya que apenas recibió su primer cargamento de crudo y debe pasar por una serie de pruebas.
La secretaria de Energía Rocío Nahle aseguró en su momento que la refinería comenzaría a producir combustible en julio de 2023 tras realizar la interconexión de las plantas y las pruebas.
Empero, fue el presidente Andrés Manuel López Obrador quien este viernes dio a conocer que “ayer empezaron a cargar, lleva un proceso como de un mes de estabilización”, y agregó que “ayer ya se abrió la válvula del ducto de petróleo crudo para empezar a meterle carga a la refinería, una obra excepcional”, agregó sin dar fechas de producción estimada de combustibles.
Una fuente de alto rango de la empresa aseguró a Reuters que dudaba que cualquier producción sostenida se diera este año. “Es imposible que se alcance la soberanía energética antes de que acabe López Obrador. Será una tarea pendiente y muy difícil para el nuevo gobierno que lo suceda en octubre de 2024”, dijo.
El costo de la obra, que inicialmente se aseguró que sería de ocho mil millones de dólares, ha rebasado ya los 18 mil millones de dólares.
“Es para sentirnos como mexicanos orgullosos después de 40 años de no construirse una refinería, porque apostaron por comprar las gasolinas en el extranjero y ahora lo que queremos es la autosuficiencia energética, soberanía energética, por eso somos distintos y no saben cuánto orgullo tengo, mucho”, “celebró” López Obrador.