En el siglo XXI, por son los propios sistemas democráticos los que están corroyendo la democracia, mientras que las dictaduras han ganado terreno, al pasar de 20 a 30 en 10 años, alertaron expertos y autoridades durante el encuentro “La crisis bélica, climática y económica: los límites de las democracias para procesar la incertidumbre”, celebrado como parte de la Feria Internacional del Libro de Guadalajara.
Yolanda Díaz Pérez, vicepresidenta segunda del Gobierno de España y ministra de Trabajo y Economía Social, alertó que la democracia está en riesgo.
“Es la primera vez en la historia que, sin tener modelos alternativos, sin tener alternativas al modelo democrático, desde los propios sistemas democráticos se está corroyendo la democracia; es decir, este factor endógeno en las propias democracias es el que está golpeando desde dentro al propio modelo democrático, es la primera vez que no hay un modelo alternativo al democrático, sin embargo sí que está poniendo en cuestión en todos los países del mundo frente al partido del odio”, advirtió.
La funcionaria del gobierno español dijo que el reto de la democracia sigue siendo “ensancharla” para que pase de ser un ejercicio mediante el cual se emite un voto para elegir a las autoridades, a hacerla en una herramienta útil para los ciudadanos, que mejora la vida y que debe estar presente en la familia, en la educación, en el ámbito laboral, de cada rincón de cada nación.
“Si no aproximamos la democracia a la ciudadanía, el riesgo es fuerte y es la primera vez en la que no tenemos sistemas alternativos; no hay un modelo alternativo al democrático. Sin embargo, la democracia está más en riesgo que nunca”, advirtió.
Señaló que en varios países hay un estado de ánimo “desafectivo” de máxima preocupación porque los ciudadanos optan por no participar en la toma de decisiones, ya que no ven en la democracia la vía para las soluciones a sus problemas.
Identificó tres riesgos para la democracia: la desigualdad, que provoca desafección hacia ese sistema; la corrosión desde el propio sistema democrático y que las autoridades cumplan aquello que prometen. “Si la ciudadanía percibe que la democracia no le mejora su vida, sí hay un riesgo de involución”, dijo.
El filósofo y sociólogo francés Gilles Lipovetsky afirmó que en el siglo XXI el planeta enfrenta un desarreglo en tres grandes aspectos: en democracia, orden mundial y cambio climático.
Dijo que desde el año 2005 hay un desarreglo democrático en varios países en los que su democracia está en regresión. “Las dictaduras pasaron de 20 a 30 en 10 años, un cuarto de la humanidad vive bajo una dictadura y las democracias liberales que parecían ir hacia adelante, son solamente 34. Entonces, donde nos prometían el fin de las dictaduras, de hecho, nada está seguro, las dictaduras desgraciadamente avanzan, progresan”, alertó.
Los expertos coincidieron que si bien el mundo se ha mantenido en constantes crisis, hoy atraviesa por una multicrisis que se manifiesta en problemas económicos, de salud, de cambio climático, falta de empleo, para la cual la democracia es un factor clave, porque ésta debe generar las soluciones a esos problemas.
Con información de Expansión