El domingo de Resurrección
Por Javier Solórzano Zinser
No queda claro por qué el partido del Presidente pospuso el debate en el pleno sobre la Reforma Eléctrica.
Si nos atenemos a lo que ha manifestado la oposición no se ve por dónde puedan sumarse votos para la aprobación de la reforma, sin descartar que de la nada se abren resquicios. Lo que podría pasar sería que se enquistaran posiciones, porque las y los diputados de oposición están siendo rigurosamente vigilados, lo cual los tiene en la mira del conocido “sospechosismo”.
Las circunstancias han colocado a la oposición inesperadamente en escenarios favorables. Se le abre la posibilidad de que tenga una presencia en los medios y las redes destacada, independientemente de las limitantes del periodo vacacional, lo cual le permitirá estar en el imaginario colectivo y hacerse presente, con pijama o sin ella, en San Lázaro.
Morena ha dicho que la posposición del debate se debe, entre otros motivos, a que quieren “socializar” el tema. No pareciera ser una argumentación que explique las razones de fondo, porque a lo largo de dos meses en la Cámara de Diputados se debatió de manera profunda, plural y libremente pros y contras sobre la reforma.
Por San Lázaro pasaron especialistas, académicos, técnicos, funcionarios y exfuncionarios. Fueron debates relevantes en los cuales se expresaron ideas y planteamientos dignos de atenderse; fuimos partícipes vía el Canal del Congreso de ello.
Las conclusiones del Parlamento Abierto pudieron integrarse al proyecto original. Si bien no había obligación de ello, es claro que lo expresado en el parlamento debió haber sido contemplado por la importancia y fundamentos que se expresaron, los cuales enriquecerían una reforma que a estas alturas ya no puede ser aprobada de manera unilateral, en fondo y forma.
Lo que hay que contemplar estos días es la posibilidad de que se presenten movilizaciones previo al domingo. De hecho, estaba anunciada para ayer la presencia de grupos afines al (Presidente?) y del gobierno y de Morena en apoyo a la reforma en los términos en los que la presentó el Presidente.
Por ahora no se ve por dónde pueda ser aprobada la reforma, no se ve cómo se alcance el total de votos requerido porque, por lo menos en el papel, no se aprecia que la oposición como bloque ceda, a estas alturas un paso atrás es casi el exterminio.
Otro factor a considerar es que el Presidente va a desaparecer de la escena. A partir del jueves tomará días de descanso, por lo que no habrá mañaneras desde donde se lancen todo tipo de propuestas, ideas, señalamientos y adjetivos, los cuales se sabe tienen un gran efecto, se expanden y resuenan.
La influencia discursiva del Presidente no tendrá los reflectores cotidianos, sin soslayar que muy probablemente lo tendremos entre nosotros a través de podcasts desde donde intentará influir, desacreditar, convocar y señalar.
Si nos atenemos a la definición que ha hecho la oposición, todo apunta a que no se ve por dónde se apruebe la reforma. El siguiente movimiento, ya lo adelantó el Presidente, será enviar una ley en materia de minería lo que incluye el tema del litio.
Legislativamente va a ser una Semana Santa inédita. Lo que habrá que ver es si la oposición se mantiene en sus vehementes planteamientos. El Presidente quiere una reforma sin cambio alguno, a pesar de que el Parlamento Abierto mostró otros caminos, los cuales en muchos casos enriquecían la propuesta presidencial.
Domingo de Resurrección que no hay que perderse, será de definiciones de presente y futuro; como fuere alguien va a perder.
RESQUICIOS
En NL el registro sobre la violencia contra las mujeres está alcanzando cifras alarmantes. El gobierno del estado está tomando decisiones, pero son las mujeres las que luchan por cambiar las cosas. Mucho de ello se debe al “Grupo especial de apoyo para la búsqueda de mujeres desaparecidas y atención a los feminicidios” que encabeza Vanessa Jiménez.