El accidente aéreo ocurrido el 22 de diciembre en Galveston, Texas, donde se desplomó una aeronave de la Secretaría de Marina (Semar) durante un traslado humanitario, dejó un saldo de seis personas fallecidas, entre ellas dos elementos veracruzanos.
El marino Víctor Rafael Pérez Hernández, originario de Minatitlán, fue confirmado entre las víctimas mortales. Formaba parte del equipo que acompañaba a un menor de dos años con graves quemaduras, trasladado a Estados Unidos con apoyo de la Fundación Michou y Mau.
El segundo veracruzano, el teniente Luis Enrique Castillo Terrones, originario de Tierra Blanca, permaneció inicialmente como no localizado. Su cuerpo fue recuperado horas después por la Guardia Costera de Estados Unidos, elevando a seis el número de fallecidos.
La aeronave cayó cerca del Aeropuerto Internacional Scholes, en Galveston, durante el traslado del menor accidentado en Campeche.
Entre las víctimas se encuentran el niño, un médico residente de Jalisco, tres elementos de la Marina —incluidos los veracruzanos— y finalmente el tripulante que estaba desaparecido. Dos mujeres sobrevivieron: la madre del menor y otra acompañante, quienes permanecen bajo atención médica.
Autoridades mexicanas lamentaron la tragedia y confirmaron que se trataba de una operación humanitaria bajo el Plan Marina. Familiares de los marinos veracruzanos han recibido apoyo del consulado mexicano en Texas para los trámites de repatriación.