La gobernadora de Veracruz, Rocío Nahle García, declaró que el proyecto para instalar dos nuevas casetas de peaje en la región Orizaba-Córdoba ha sido “cancelado”, en respuesta a la inconformidad ciudadana que generó la propuesta. Sin embargo, la instalación de casetas en carreteras federales es competencia exclusiva del gobierno federal, a través de la Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes (SICT) y los concesionarios autorizados.
Nahle explicó que Banobras planteó administrar la obra mediante una asociación público-privada (APP) y colocar un carril externo con caseta de peaje, propuesta que contradice el compromiso de campaña de construir un libramiento sin costo directo para los usuarios. “Yo ya hablé con Banobras el viernes (…) ese no es el proyecto que pedimos, batallamos mucho para quitar una caseta que era tortura como para esto”, afirmó.
“No se va a hacer si el Estado no lo quiere”, sostuvo, al reiterar que su administración mantiene el proyecto de libramiento Córdoba–Orizaba, pero bajo un esquema distinto.
No obstante, la gobernadora no tiene facultades legales para autorizar, cancelar o modificar proyectos de infraestructura carretera federal, como lo establece el marco jurídico vigente. Las concesiones, tarifas y ubicación de casetas son determinadas por la SICT y las empresas concesionarias, en este caso Caminos y Puentes Federales (CAPUFE) o particulares, según el tramo.
