Quebradero

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Habrá mesura con las mismas formas

Por Javier Solórzano Zinser

No se vislumbran cambios en fondo y forma para el periodo ordinario del Congreso.

Habrá que ver cómo queda constituida la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados, en la de Senadores, todo indica que resolvieron bien el asunto. Por lo que ha pasado estos días la mayoría trató de quedarse en Diputados con la Mesa Directiva el mayor tiempo posible, por esto quizá el viernes quede constituida.

No quisieron soltarla porque muy probablemente querían que el informe de la Presidenta fuera entregado al todavía presidente de debates de diputados y no a la oposición. Ricardo Monreal ha asegurado que cumplirán con los acuerdos y que el PAN será quien encabece los debates.

Lo que ha pasado estos días ha creado un mal ambiente en el Congreso. Morena está tratando de evitar otro zipizape como el del miércoles, en el cual por más que ahora se quiera victimizar al expresidente del Senado, es evidente que fue un lamentable momento de corresponsabilidades. A lo largo de muchos meses, la estridencia del ahora expresidente determinó el rumbo del debate y las confrontaciones.

Entre que la mayoría quiere los reflectores y quieren también evitar un nuevo lío, se quedaron por lo menos 5 días más con la Mesa Directiva en San Lázaro. Por lo que se ve será cuestión de algunos días para que el PAN encabece la presidencia de la Cámara de Diputados.

Para la oposición es muy importante tener al menos una posición estratégica, lo que no significa que haga con ella lo que quiera. Si algo tendrá que hacer es mostrar madurez y recordar que sé es presidente o presidenta para todos los diputados sin importar su signo político, a diferencia de lo que pasó en el Senado.

El gran tema desde hace varios días, el cual ya está en el debate cotidiano del Congreso y también en la sociedad, es un asunto que está sin estar: la reforma electoral. A pesar de que no se va a discutir en el Congreso en este periodo va a ser difícil abstraerse de él porque se van a llevar a cabo foros abiertos en donde presumimos que muchos legisladores serán invitados a participar o querrán hacerlo.

La clave seguirá siendo si existe voluntad de escuchar y atender. Estos años hemos visto cómo se hacen foros, se convocan debates e incluso se llegan a discutir las reformas en las plenarias, pero a la mera hora todo pasa de largo y no se atienden las propuestas que en algunos casos merecerían ser revisadas; seguimos bajo el síndrome de no cambiarle a los proyectos ni una coma.

Hemos visto cómo se ha aplicado la maquinaria del poder bajo lo que han llamado la aritmética, dicho de otra manera, la mayoría se ejerce con base en la interpretación de lo que el electorado dictó en las elecciones. Sin embargo, hay muchos factores a considerar. Uno de ellos es que la Presidenta Claudia Sheinbaum alcanzó el 56% de la votación, lo que significa que un 44% no optó por ella.

Asimismo, no puede pasarse por alto, que, a pesar del rotundo triunfo de Morena, muchas de las elecciones se definieron por pocos votos, lo cual tenía a través de reformas electorales anteriores un elemento positivo, porque se buscaban los equilibrios, los cuales se expresaban a través de los plurinominales.

En muchos casos los triunfos electorales para el Congreso se han definido por pocos votos, lo que obliga a considerar el equilibrio de fuerzas propio de la decisión del electorado.

Hay temas importantes que tratar a partir de hoy. La semana laboral de 40 horas; las leyes secundarias de la reforma al Poder Judicial; el muy delicado asunto de extorsión; la consolidación de los elementos que conforman los nuevos aparatos de seguridad, entre muchos otros.

Lo que no se aprecia es que las formas cambien, aunque se establezcan mejores ánimos.

RESQUICIOS.

La Secretaría de Gobernación optó por la prudencia. A diferencia de sus antecesores en el cargo, no tomó el micrófono y entendió que lo que tenía que hacer era entregar el informe y que el Congreso lo analizara.