El peso en el piso
Por Mónica Camarena Crespo
Mientras el pueblo le dio el voto mayoritario a Morena entre otros factores por los programas sociales, la mayoría de los mexicanos poco se ocupa de analizar la grave situación financiera por la que atraviesa el país y que le van a heredar a la próxima presidenta.
El tema no se toca en las “mañaneras” pero es una realidad.
El peso mexicano fue la moneda más depreciada de las economías emergentes durante el mes de junio, un fenómeno que no se veía desde 2020, en tiempos de pandemia: “La reforma judicial sigue provocando incertidumbre”, de acuerdo al economista José Yuste.
Y es que el peso mexicano ocupa ese penoso cuarto lugar a nivel mundial debajo del real brasileño, el peso argentino y la lira turca.
Pero nada es accidente, a partir de la nueva mayoría de Morena, AMLO impuso la Reforma al Poder Judicial como primera tarea de los legisladores del partido en el poder, hecho que provocó que los inversionistas reaccionaran nerviosos ante la posibilidad de que en México, los jueces sean elegidos por la vía popular y con ello se pierdan contrapesos y las inversiones también pierdan garantías, así de sencillo.
Mientras que para el inquilino que se cree dueño de Palacio Nacional han sido días de festejo por la arrolladora votación, a partir del 2 de junio el peso ha perdido el 8,1%.
De acuerdo a Gabriela Siller, directora de análisis económico de Banco Base: “Si la reforma judicial pasa como está ahora, el dólar pudiera llegar a cotizar a 20 pesos y dependiendo de cuánta aversión al riesgo genere esto, pudiera subir aún más” señala.
A López Obrador nunca le han importado los mercados, de hecho no sabe a ciencia cierta porque hay que cuidarlos, no hay que olvidar que en su discurso populista, se atrevió a decir que se trata de “cúpulas convenencieras” que “no piensan en el país”.
La ignorancia puede seguir haciendo mucho daño, más cuando viene desde la presidencia de un hombre que está a punto de concluir un mandato constitucional, pero que se niega a dejar de tomar decisiones, muy a pesar de la destrucción sin tregua al país.
Ágora
El peor último episodio de un partido político en estado vegetativo se llama “Alito”.
X: @monicamarena