Negligencia criminal también con desastres naturales
Por Mónica Camarena Crespo
El huracán “Otis” fue catalogado por científicos como un fenómeno “anómalo” de alto impacto; evolucionó en pocas horas, eso es cierto, pero hubo información al respecto para que las autoridades de todos los niveles tomarán previsiones urgentes, no fue así.
Ni siquiera se detuvieron a revisar los avisos, por ejemplo, del Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos (NHC, por sus siglas en inglés) que alertó que la entonces tormenta tropical “Otis” podría convertirse en un huracán más de 21 horas antes de que el sistema azotara la zona de Acapulco, en la costa de Guerrero.
La NHC publicó a las 9:31 pm, la noche del mismo martes, otra alerta que señalaba que “Otis” azotaría la zona como un huracán de categoría 5, con potencial catastrófico y fuertes vientos que podrían poner en peligro la vida de las personas.
Acapulco, de los puertos más importantes de México, turísticamente de excelencia mundial, hoy está destrozado, con casi 30 muertos, desaparecidos y daños en zonas marginadas aún no evaluadas. Los empresarios saben que será difícil levantarse de los daños que ocasionó “Otis”.
NEGLIGENCIA EN LOS 3 NIVELES DONDE GOBIERNA MORENA
La comunicadora Fernanda Familiar que se encontraba en Acapulco la noche del impacto de “Otis”, narró hechos inimaginables en otros tiempos.
Familiar en entrevista con el periodista Pascal Beltrán, contó que pocas horas antes de la entrada del huracán “Otis”, ella alertó durante una cena en donde se encontraban secretarios de despacho del gobierno de Guerrero, que se deberían tomar acciones rápidas pues tenía información desde la Ciudad de México de lo peligroso del fenómeno meteorológico. Ninguna autoridad en esa reunión estaba siquiera enterada del hecho y nada hicieron para prevenir a ciudadanos y turistas.
La cultura de la prevención está borrada de la agenda de las autoridades emanadas de Morena; no hay para donde hacerse, nadie le avisó a ninguna persona que vendría un fuerte impacto en Acapulco por “Otis”.
La responsabilidad es directamente para el gobierno municipal de Acapulco, emanado de Morena, del gobierno de Guerrero, emanado de Morena y del gobierno federal, de Morena.
El número de fallecidos todavía no se puede calcular con exactitud, los desaparecidos son muchos y se van a agregar a la lista de muertos por el huracán “Otis”.
Como ha ocurrido con otros desastres meteorológicos, el gobierno de Andrés Manuel López Obrador solo maquilla los apoyos con sus mismos programas sociales, los cuales podrían llegar después de mucho tiempo, porque antes suelen levantar unos censos a modo.
Así como quedó atascado el Jeep donde AMLO buscaba no llegar a Acapulco, de la misma manera el apoyo a los damnificados se va a “atascar” más en tiempos electorales, lo que verdaderamente les importa.
@monicamarena
