Ante la tímida “exigencia” de la rectoría de la Universidad Veracruzana para que el gobierno estatal le asigne el 4 por ciento del presupuesto total de la entidad como le corresponde constitucionalmente, el gobernador Cuitláhuac García Jiménez rechazó cumplir con lo que dice explícitamente la ley para en su lugar, “interpretarla”.
Dijo que dado que “existen dos interpretaciones” sobre el financiamiento, manifestó que la asignación de recursos para la casa de estudios se hará conforme a lo establecido en la Fracción II del Artículo 72 de la Constitución Política del Estado, la cual dispone que “los Ingresos de Libre Disposición son la base para el cálculo de las asignaciones a órganos autónomos con porcentajes específicos del Presupuesto General”.
Así, este año a la UV se le otorgaron más de 700 millones más que en 2022, más 403 millones 402 mil 960 “adicionales”, refirió.
“Encargué analizar el presupuesto para dar más de lo que ya hemos otorgado”, afirmó en conferencia de prensa, pues el Artículo 10 constitucional señala que no debe ser inferior al asignado el ejercicio anterior y que, aparte de un mandato oficial, se trata de un “compromiso de convicciones y confianza en la Rectoría”.
Según García, el “respaldo institucional” a la UV ha sido posible gracias a “la honestidad y el combate a la corrupción”.
