Que no quede huella
Por Mónica Camarena Crespo
Los pequeños empleados demoledores en que se han convertido los legisladores de Morena están dispuestos a todo con tal de acatar instrucciones del peligroso mesías y allegarse de premios para su futuro político.
El país se puede ir al carajo, lo sucedido en la Cámara de Diputados el pasado martes y miércoles con la aprobación “Fast Track” de iniciativas enviadas por el presidente para acabar con todo, fue la antesala de otra propuesta de los morenistas ahora en el Senado y que tiene el objetivo primordial de “no dejar huella” de la monumental corrupción con la que opera el gobierno de López Obrador y su pandilla.
Y sí, como se veía venir, fue el presidente del Senado, Alejandro Armenta, quién propuso ayer jueves desaparecer el Instituto Nacional de Transparencia y Acceso a la Información (INAI). Sin empacho, los empleados que cobran cómo legisladores, presentaron la iniciativa que plantea que el INAI sea “absorbido” por la Secretaría de la Función Pública (SFP) para dejar sólo un ente encargado de la transparencia.
«Como podemos observar, son Instituciones que comparten objetivos y actividades y que, al tener puntos en común, se hace notar la posibilidad de que el INAI sea absorbido por la Secretaría de la Función Pública, con el fin de tener un solo ente responsable de la Transparencia de la información Pública, así como la protección de datos de las personas», señalaba el documento.
Sin embargo, el poblano Alejandro Armenta después reculó con su propuesta de desaparecer el INAI; a pesar de que la iniciativa fue publicada en la Gaceta del Senado fue retirada pocas horas después ante el descontento incluso de otros legisladores de Morena.
Pero en realidad de lo que se trata, es de acabar con el INAI, un instituto que ha logrado desde hace muchos años y gracias a la lucha de varios, la transparencia y acceso a la información. La historia del INAI ha permitido descubrir casos de corrupción en gobierno pasados y hasta en el actual, no olvidemos la estafa, esta sí “super maestra” de Segalmex que alcanza los más de 15 mil millones de pesos.
Reza el dicho “el miedo no anda en burro” y aunque son bastante “burros” en el tema académico, AMLO y su pandilla saben el tamaño del robo que se ha llevado a cabo desde el día uno de la presente administración morenista.
Sellar el acceso a la información es de alta prioridad para el presidente y varios de sus operadores; tan solo el despilfarro de la “NO” refinería de Dos Bocas en Tabasco, alcanza ya los 11 mil millones de dólares y lo peor, sin un solo barril de petróleo.
Ahí está el motivo de tener inmóvil al INAI al parar desde el Senado el nombramiento de comisionados y ahora la “intentona” y “fallida” propuesta de desaparecerlo. Es como si un ladrón propusiera que se cerraran todas las cárceles para evitar quedar preso.
Ágora
En el colmo de la obviedad y la desesperación, ayer Morena en el Senado reventó un acuerdo para nombrar nuevo comisionado del INAI; la consigna de AMLO es contundente, acabar con la transparencia y rendición de cuentas. Así traerán sus números.
@monicamarena