Mientras los testaferros de la «4t» vomitan en redes contra la periodista Peniley Ramírez por contar la verdad sobre el caso Ayotzinapa, la Fiscalía General de la República ya canceló 21 órdenes de aprehensión de las 83 libradas contra presuntos partícipes en la desaparición y asesinato de los 43 normalistas. Y el vómito se les atragantó.
HIPÓCRITAS Y SIMULADORES
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