Con un lenguaje propagandístico y visceral, la Comisión Federal de Electricidad informó a través de un comunicado que la central nuclear de Laguna Verde continuará operando hasta el 10 de abril de 2055, luego de ser ratificada la renovación de su licencia aprobada en 2020 por la secretaria de Energía Rocío Nahle García.
Esto, a pesar de las constantes denuncias sobre alarmas de emergencia dentro de la nucleoeléctrica, que el organismo que dirige Manuel Bartlett Díaz calificó como “versiones falsas y malintencionadas”, mientras aseguró que Laguna Verde “genera energía, firme y limpia, bajo los más altos estándares internacionales de seguridad”.
El organismo puntualizó que después de la renovación de licencia de la Unidad 1 de la central nuclear emitida por la Secretaría de Energía en julio de 2020, se “garantiza para el Sistema Eléctrico Nacional la confiabilidad energética que las instalaciones nucleares ofrecen en beneficio del pueblo de México”.
“Consciente de la necesidad e importancia de la energía nuclear de la CNLV para México, la secretaria de Energía Rocío Nahle García, autorizó la renovación de la licencia de operación a la Unidad 2 de la Central Nucleoeléctrica Laguna Verde (CNLV-U2). La licencia cuenta con el aval técnico de la Comisión Nacional de Seguridad Nuclear y Salvaguardias (CNSNS) y tiene una vigencia del 11 de abril de 2025 al 10 de abril de 2055”, expuso la CFE.
Este mismo jueves y en medio de protestas de los lugareños, se llevó a cabo un simulacro del Plan de Emergencia Radiológica Externo (PERE) en las inmediaciones de la Central Nucleoeléctrica Laguna Verde, con el objetivo de evaluar la capacidad de respuesta para salvaguardar a la población.
Según la CFE, “se mantiene a la vanguardia de la producción de energías limpias en el país y persiste como el garante de la confiabilidad del Sistema Eléctrico Nacional, que sigue bajo asedio de los intereses extranjeros en desacuerdo con que los mexicanos generen su propia electricidad”.
