Con el pretexto de la “inauguración” de las oficinas de lo que será la refinería Olmeca en Dos Bocas, Tabasco, la secretaria de Energía, Rocío Nahle García, desplegó una campaña propagandística por el estado de Veracruz.
En diferentes caminos, carreteras y autopistas de la entidad se colocaron espectaculares con la imagen de la política zacatecana, dándole las “gracias” por “hacer realidad” la refinería de Dos Bocas, que no está terminada en ninguna de sus fases productivas y que por tanto, no genera aún ni una gota de gasolina, lo cual podría suceder hasta mediados de 2023.
En medios de comunicación afines al gobierno de Cuitláhuac García, la promoción pública de la imagen de Nahle se manejó como si los veracruzanos fueran los que agradecieran a la funcionaria por una obra que, además, se construye en el estado de Tabasco, de donde son originarios el presidente Andrés Manuel López Obrador y el secretario de Gobernación Adán Augusto López, quien además es aspirante a candidato presidencial.
Al mismo tiempo, toda la “cargada” del régimen en Veracruz fue lanzada en favor de la secretaria de Energía. Secretarios de despacho, diputados y hasta magistrados del Poder Judicial estatal “felicitaron” a Rocío Nahle y la mencionaron como “la que tiene más fuerza política en el estado”.
