La noche de este sábado fueron liberados los jóvenes José Leonardo, Manuel Alejandro, Luis Francisco, Brian Alberto, Juvencio y Lorenzo, que desde septiembre estaban presos en el penal de Pacho Viejo acusados de “ultrajes a la autoridad”.
Tras una audiencia de más de cuatro horas, la juez Saray Sosa Moreno no tuvo más que acatar el amparo que desde el 15 de diciembre concedió un juez federal de distrito a los seis muchachos y dio de plazo tres días para que fueran puestos en libertad.
Sin embargo, determinó el pago de una fianza de 100 mil pesos así como la firma periódica de los acusados para seguir su proceso en libertad.
El Poder Judicial de Veracruz estuvo a punto de caer en desacato, ya que el juez del caso se fue de vacaciones y la que quedó en su lugar arguyó no conocer del caso para no cumplir el ordenamiento judicial.
El viernes 17, el senador de la República y coordinador de la bancada de Morena en la Cámara alta, Ricardo Monreal, acusó que en Veracruz hay una justicia “omisa y mediocre” que “no merece este pueblo tan extraordinario”, y llamó al juez federal a acusar de desacato a los jueces locales y a la Comisión Nacional de los Derechos Humanos a actuar para “exigir la liberación de los jóvenes y de todos quienes están padeciendo esta prisión y reparar el daño”.
Antes de la liberación, el gobernador Cuitláhuac García Jiménez arremetió contra Ricardo Monreal, quien también adelantó que desde el Senado presentará un exhorto a la LXVI Legislatura del Estado para que derogue el delito de “ultrajes a la autoridad”, por violatorio de derechos humanos.
Según García Jiménez, “nosotros estamos del lado de las víctimas”, y en referencia a Monreal dijo que “si alguien en vez de estar atento a los problemas legislativos del Senado quiere ser defensor de delincuentes, pues allá él”.
